Bosque Azul. Area de entrenamiento de Ginsen

Cuando Ichisaru vio el bosque de diferente color se sombró, no conocía esta parte de Konoha tan bella. Se colgó de las ramas de los arboles, pasandose de uno por uno como un mono, emocionada y feliz de encontrarse en ese lugar tan único y sin igual.
Pero se detuvo cuando cerca de ahí olfateó a un humano... ¿acaso seria su maestro?. Parecía que su diversión y exploración debía esperar. Empezó a balancearse de árbol en árbol hasta detenerse y ver que era un adulto descansando. Se balanceó hasta sentarse en una rama, aun lejos y con espacio personal suficiente y lejos de él.

Se le quedó viendo y de nuevo de su mochila sacó una banana. Alzó la mano señalandole mientras daba la primera mordida.

- ¿Sensei? - preguntó sin emoción - ¿Ginsen? - ladeó la cabeza mientras seguía con su aperitivo.

Bajó la mano con la que señalaba, no le iba a saludar a un desconocido aunque luego tendría que lidiar con él en los siguientes días. Empezaba a decir sus calificaciones finales y lanzó un pequeño gruñido, declarando su molestia, ella no sabía nada de Ginsen.

- Grr... - y también la estaba observando. En su mente lo estaba tachando de acosador, pero siguió sin emitir una palabra. Mas le atrajo la atención que un animal llegaba, un halcón.

Avanzó para poder ver aquel ave imponente hasta que se fue, quedandose viendo partir y se volvió a alejar hasta su posición inicial, viendo a su maestro con vigía, no dejaría que la viera hacer sus monerias.

Decidió ignorar la pregunta formulada para ella, no le diría sus motivos. Aunque ella en realidad no tenía un plan de vida de lo mas soñador o genial, cumpliría lo que tuviera que cumplir y viviría para ella sin importarle los demás.
Pero olfateó de nuevo un olor, eran plátanos que el tenía y le estaba ofreciendo. Ella ya tenía su manojo, pero no quería acabarselo todo, por lo que avanzó hacia el, aun manteniendo su distancia y tomando aquel fruto amarillo, empezando a descarapelarlo y comerlo.

- n-no es la gran cosa - comentó mientras evitaba la mirada de otro. Esta sería de las pocas veces que su sensei le oiría hablar y tal vez no gritando o maldiciendo.

- ... - Asintió tirando la cascara de platano al suelo, no iba a afectar a la naturaleza.

Pero su comentario de que no era muy comunicativa casi le hizo soltar un "aleluya". Por fin entendía que el no era de expresarse con palabras y ni de que estas fueran para la gente.
Hizo un gesto con la mano, ya no se le antojaban mas plátanos. Levantó un pie para rascasrse la cabeza mientras cerraba su bolsa. Se paró dejandola en una rama lejos de su maestro, como si le fuera a robar. Pero antes había sacado unos vendajes muy viejos pero que aun servían y se los ataba a sus pies y manos; tal vez estaba acostumbrada a andar de palma y pie desnudos por la naturaleza, pero con el tiempo le cansaba.

- hum... - empezó a balancearse y pasearse por las ramas de ese mismo árbol, subiendo y bajando de nivel, no quería irse y además quería tenerlo vigilado a su sensei, para intentar averiguar más de él.

Fue una Caminata mas o menos interesante, pude recorrer pueblo y bosque juntos, pero habia venido para entrenar y no para otra cosa... A ver que va a ocurrir entre mi "Compañera" y mi nuevo Sensei...

Que sera de ella? No se, pero eso seguro voy a averiguar aunque sea un poco hoy mismo.
En cuestion de minutos llegue a una zona mas o menos abierta del sector, mas iluminada y deleitada por un rio que atravesaba el lugar, desde alli pude ver a los 2 que me estaban esperando...
Perdon por el retraso, tenia cosas que terminar... - Te llamas Ginsen no? - Y tu eres...

Deje que ellos 2 respondiesen por mi mieentras me acercaba mas.

El nuevo por fin había llegado, la chica mono ya se andaba desesperada por solo pasearse por la copa de ese árbol. Emitió un gruñido lo suficientemente fuerte para que le oyera su maestro, NO quería que le dijera por diminutivos.
Y de nuevo su sensei repetía el procedimiento de hablar acerca de sus calificaciones y la persona del nuevo, que se llamaba Hyoshe. En lo que bajaba a saltos prestaba atención a la presentación del otro, que no explicaba gran cosa.

Aterrizó cerca de los dos, pero aun manteniendo en margen su espacio personal, y apoyada a cuatro patas pero miró de nuevo a Ginsen y le gruñó, para que notara su mal humor aun seguía a causa de aquel "Ichi-chan". Ahora le pedía una cierta preparación para una prueba.

- ... - alzó la mano con flojera hacia su frente, no tenia de otra mas que acatar la indicación. Empezó por algo sencillo, como el calentar, el balancearse por los arboles fue una especie de calentamiento para ella.

Bueno... Por lo ocurrido, eso aclaraba todo: Dudo que socializar con mi compañera surta efecto alguno, solo espero que no sea contraproducente...
Mi sensei dice haber sido parte de la fuerza de asesinato de Konoha, apuesto que en alguna situacion de riesgo su forma tan amable de actuar se transformara en una personalidad fria o despiadada...

Por el otro lado, Ichi parecia ignorar mi presencia en absoluto mientras se concentraba en sus propios instintos, hasta podria decirse que le soy una molestia en estos momentos... El que quiere celeste, que le cueste, ambos sabemos que aunque pueda ocurrir algo ninguno de los 2 se va a marchar con las manos vacias.

Con que una prueba Física? ok - Observe el lugar detenidamente mientras trazaba con mi imaginacion algun circuito que pudiese recorrer... Con los arboles podria trazar una seccion de carrera de saltos de rama en rama, para al final poder balancearme en la ultima de ellas y caer al piso sin perder fluidez, y tras ello, para ejercitar aun mas los brazos y piernas, el realizar algunas cuantas volteretas para subir a las copas de los mismos.

Ya todo estaba hecho, solo quedaba comenzar. Observe a mi compañera una vez mas, ella se encontraba balanceandose como un mono en un arbol. Suerte - no fue algo claro, pero tampoco fue un susurro; eso fue lo ultimo antes de empezar a correr a la rama que se encontraba mas cerca a mi alcance.

Pensó que seria algo sencillo o razonable, como una competencia de fuerza o velocidad, de hecho espero todo menos lo que había hecho. Alcanzar hojas, casi no había nada de desplazamiento y derrepente el ambiente se había vuelto algo raro y difícil de respirar. En su mente maldijo al sensei, ese tipo estaba loco.
No podia adaptarse a animales que tuvieran capacidad de respirar con este nivel, no estaban a su alcance. Debian actuar con cautela.

- entiendo... - Por unos momentos empezó a respirar lenta y profundamente, tenía que acumular la mayor cantidad de oxigeno que pudiera para que no le afectara el cambio. Asi se mantuvo por unos hasta el minuto. En cualquier otra situación hubiera durado 3 min. pero necesitaba actuar ya.

Se empezó a lamer lo que su lengua podía alcanzar de piel en abundancia. Flexionó las piernas y dio un salto al aire. Movía su cuerpo para que las hojas se adhirieran a su piel, a causa de la humedad y la saliva y otras las tomaba con las manos lo que fuera posible para evitar que se le acabara el aire tan pronto.

En lo que parecia, la primera impresion mostraba que esto tenia algun truco bajo la manga, no creo que sea simple casualdiad que nos pida juntar hojas.

Entendido... - En efecto, tenia razon... El lugar donde me encontraba habia cambiado, era facil notarlo por lo costoso que fue recuperar el aliento tras una simple palabra, ademas, las hojas se movian... con menos movimiento y mas descendencia, fruto del cambio de hace segundos...
Mi primera prioridad fue tomar un gran respiro mientras comenzaba levemente a mover al cuerpo... Al mayor movimiento, mayor gasto de energia, y por ende, mas necesidad de oxigenar el cuerpo...
Ligeramente, mi cuerpo daba simples vueltas sin salir de la zona marcada con los brazos extendidos a lados opuestos, con la diferencia de que un brazo se encontraba mas arriba que otro, eso permitiria que pudiese girar y agarrar con la mano mas baja lo que no pude con la primera.
Entre cada 2 giros, exhalaba una ligera cantidad de aire para mantener el ritmo y no cansar al cuerpo antes de tiempo, solo era cuestion de agarrar la mayor cantidad de hojas con las manos, preparadas para agarrar lo que la otra no podria, algunas se enredarian en mi pelo al caer, y otras caerian en mis hombros y brazos, dando mas tiempo a que la mano que se encontrase abajo pudiera agarrarlas cuando cayesen, o que directamente no cayeran y me facilitaran la tarea...

Cada vez que me quedaba con poco aire, reemplazaba el exhalo correspondiente para tomar otro aliento bastante calmado, era cuestion de no perder el ritmo y no apurarse...

Al aterrizar al suelo, la gran mayoría de las hojas que había capturado en su piel se había ido. Instintivamente miré a Ginsen con unos ojos afilados, se había molestado.

- Grrrr... - Aguantó las enormes ganas de insultarle, pero eso no solucionaría el problema que tenía.

Guando en sus bolsillos las pocas hojas que le quedaron en su piel y sus manos y las guardó. Comenzó con su rutina de respirar profundamente y obtener el oxigeno mientras pensaba que otra idea podía ser eficaz, y que pudiera evitar que le arrebataran sus hojas.

Lo que pensaba era una locura, eso la agotaría por completo, el usar un justa. Se tentó a hacerlo juntando sus manos, aun pensandoselo seriamente. Se golpeó un par de veces la cabeza, no lo haría.

- Ese cabrón me las pagará un día. - murmuró mientras volvía a saltar volvía a tomar las hojas sin prisa con las manos. Era la única manera segura de que por una ráfaga no se le escaparan de las manos, pero debía guardarlas en sus bolsillos.

Solo pude pensar 1 cosa cuando Ginsen provoco tan molesta jugarreta... Desgraciado -.-
El tipo esta entrenado para provocar miedo, rabia, enojo y cualquier otra emocion que perjudique en la batalla; con sus alumnos era un simple desgraciado, con sus contrincantes, un desgraciado bastante eficaz u.u.
Antes de volver a comenzar, mire a mi compañera por unos segundos, habia pasado por la misma y humillante jugarreta, cosa que me llevo a darle una mirada complice mientras pensaba que haria...
No tengo mangas como para tener un As, pero tengo bolsillos en mis pantalones que podrian venir utiles, al menos por ahora. Usar alguna otra cosa mas que todo el cuerpo me cansaria mas rapido en esta situacion, y necesitaba ahorrar aire.
Lo poco que me quedo lo guarde, no sin antes apretar un poco los puños como para descargar la mala pasada, ahora tenia que seguir girando y juntando lo que quedaba en el aire, dirigiendome mas a donde habian volado las hojas sin alejarme de la zona delimitada, tenia que agarrar lo que podia tal como lo hacia antes, solo que esta vez entrecerraba los puños y compactaba un poco las hojas para agarrar mas a la vez, cuando tuviese suficiente lo guardaria. Mi mente divagaba pensando, y mi mirada estaba fija tanto al Sensei como a donde habia ido su invocacion, tengo que aprender a esperar lo inesperado.

Aterricé de nuevo intentando aguantarme el lanzarme sobre el sensei y tal vez arrancarle la cara para que se le quitara lo gracioso. Guardé las hojas en lo poco que cabían de mis bolsillos.
Saqué un kunai y con el empecé a cavar, extrayendo un poco de tierra, intentando ablandarla un para sacarla con las manos. Cuando hubo un agujero pequeño decente empecé a tomar las hojas guardadas en ambos bolsillos, que parecían estar bien y las puse en el agujerillo y rápidamente volví a taparla con la tierra.

Volteó la mirada al sensei y le mostró los dientes y le sacó la lengua. No tenia ni interes ni ganas en sus bromillas, intentaría hacer su mejor esfuerzo y si falla, le importaría un bledo las críticas de su maestro.

Volvió a saltar, pero esta vez con mas fuerza para llegar más arriba y tener mas tiempo y oportunidad de tomar hojas en el aire hasta que se acabara su tiempo.

Mirando de nuevo a Ichi... Agh, se agotara el doble de rapido si se motiva tanto :S
Con que el nos pedia 50 hojas no? entonces hojas vamos a darle...
Primero que todo, debia asegurarme de respirar bien, ya que el aire del lugar se volvia mas ligero, las mismas rafagas que nos arruinaban el trabajo facilitaban el recuperarse un poco al poder respirar bien con ese viento; con las energias mas cargadas, moverse seria mas sencillo.
Finalmente, se me habia ocurrido una idea bastante basica pero podria funcionar, nuevamente guardando lo poco que tenia en las manos en el bolsillo sin fuerza alguna, deje de girar y me dirigi casi al limite de donde tenia permitido moverme, para asi poder pararme en contra de la direccion de las rafagas.
Con esta posicion, ademas de poder seguir juntando las hojas que caian, podia interceptar las que el viento lanzaba, ademas de recibir una buena brisa en la cara.
Primero me concentraba en juntar la mayor cantidad de hojas con ambas manos, tanto cayendo del aire como volando por el viento, una vez llenas las 2 manos, junte todo lo que habia conseguido y lo coloque en un lugar donde podrian mantenerse sanas y no volarian: Justo en el costado del pantalon, donde a cualquiera se le ocurriria colocar una funda de algo, salvo que yo puse las hojas entre la parte superior del mismo pantalon y mi cintura, quedando perfectamente ajustadas y quitandome la preocupacion de que volasen.
Por ahora eso serviria, mientras tanto, algunas hojas que no agarraba quedaban pegadas en mi cuerpo sin moverse, fruto de las rafagas que no permitian que se detengan y mi cuerpo que bloqueaba su camino. Ademas de juntar por mi mismo, habia obtenido una ventaja a partir de los mismos vientos.

Al volver a aterrizar todo había terminado. No hubo necesidad de mostrarle las hojas que tal ve vez por que estaban rasgadas, pero por unas manchas la parecía algo increíblemente ridículo.

Al ver que le entregaba algo de chocolate el cual tomó con rapidez con la mano, evitando tocar a su maestro; quitó la envoltura y lo empezó a comer rápido mientras oía las indicaciones y asentía, pues no tenía de otra más que presentarse.

Mientras rápido en un par de saltos, y tomó su bolsa y bajó de un brinco, aterrizando casi a lado de su compañero apoyandose en el suelo a cuatro extremidades. Le miró de reojo. Ya no tenía mas deberes que cumplirle a su equipo. Sacó un plátano y lo miró de nuevo extendió la mano para que tomara el fruto amarillo.

- Uu-uuh.. - se expresó igual que... ¿un mono?. Con esa expresión agitó la mano levemente en son de despedida, ella buscaría que hacer lo que le quedaba del día, además de un buen lugar para dormir.

Por lo que veo, fallamos el reto de las hojas, y aunque vimos como Ginsen nos habìa respondido, al parecer no esperaba que lo lograramos, pero esperaba un mejor desempeño de sus alumnos :S
Bueno, tampoco esperaba destacar ni nada, pero tendre que esforzarme mas la proxima vez si no quiero volver a fallar de esta manera - Entonces nos veremos mañana... - le dije al Ex asesino antes de que dejara el lugar mienrtas guardaba el chocolate en el bolsillo ala vez que trataba de sacar las hojas del mismo.
Quien diria esto, pero , mi propia compañera habia bajado de los arboles que la divertían tanto y me habia dado... Una Banana - Hace tiempo que no como de estas.. Gracias - fue lo único que pude decirle; aunque fuera algo solitaria y no hablara mucho, al menos era amable. Tomando la Fruta y el Chocolate, me despedí de Ichi para seguir mi camino, lo único que podía pensar era en que necesitaría alguna buena estratagema para hacerlas cosas bien mañana, y de paso una buena arma.
- Jej, espero el día en que alguien combine estas 2 cosas - mientras comía un poco de cada cosa alternándolas, me dirigía nuevamente a Konoha, necesitaba prepararme, tanto fisica como mentalmente para el siguiente reto

No habia pasado mucho tiempo desde que deje el lugar en el cual Ginsen nos enseño la derrota hoy, la unica diferencia, es que yo me encontraba solo esta vez.
Debia encontrar lo necesario, no tenia ganas de volver con las manos vacias y no podia desaprovechar tampoco la oportunidad. Estuve un buen rato buscando entre tanto bosque, pero finalmente pude encontrar una pequeña zona donde crecia Bambu en abundancia, era justo lo que necesitaba.
Acercandome al mismo, saque mi nuevo Kunai de Combate el cual parecia mas Filoso y Resistente que el Lanzable, y con el, me dispuse a cortar una caña de bambu de al parecer metro y medio con un grosor y diametro aceptable para una Lanza. La resistencia de este hueco material era increible, por loq ue estuve un buen rato intentando cortarlo con la mayor presicion posible...
Habre estado unos 30 Minutos cortando esa maldita caña sin intentar pasarme de mano, y para cuando lo consegui, solo me quedaba comenzar con el ensamblaje... Inmediatamente coloque el Kunai que use en el Extremo de la Caña a modo de Punta, y con las Venda que tenia, lo termine de atar y rellenar los espacios faltantes para que no se moviese. Aun sin terminar, saque uno de los 2 cables que habia comprado y jugando a embocar el hilo en el agujero, coloque una aguja en cada extremo de la misma y a modo de Atarlo, pase uno de los extremos por el Anillo del Kunai para tener cada aguja en lados opuestos y asegurar la Venda que sostenia todo con el Kunai fijado por ambos. Finalmente, con lo poco de cable que quedo, hice un nudo para reforzar el agarre y clave cada aguja en la caña, fiajndolas definitivamente...

Era una lanza bastante Improvisada y Primitiva, pero cumplia su funcion, me dispuse a verla con un ligero orgullo mientras reposaba en un arbol...

Objetos usados = 1 Kunai de Combate, 1 Cable, 1 Venda, 2 Agujas

Objetos Obtenidos = 1 Lanza de Bambú